El texto "La letra con sangre Entra" relata la historia de un niño, el cual tiene la edad suficiente como para entrar a la escuela y que desde mucho antes de saber que debía comenzar a asistir a esta, había ido gestando una especie de temor hacia las instituciones educacionales, justamente por las experiencias contadas por los niños con que solía jugar, cuando llega su primer día de clases y asiste durante varias semanas, el niño comienza a gestar sentimientos de odio y repudio al hecho de estudiar y de adquirir conocimiento, ya que el no logra comprender, el real sentido del aprendizaje, no sabe porqué debe ir a la escuela, el solo recurre a ella porque es obligatoria, porque es una orden de sus mayores. Todo ese repudio hacia la escuela va orientado principalmente a las prácticas docentes utilizadas en esa época, ya que con estas el estudiante llega a temer de la profesora, creando en él incertidumbre, inseguridad y deseo de crecer pronto para no seguir siendo castigado.
De cierta forma se puede llegar a entender la actitud de la docente en cuestión ya que el sistema educativo que imperaba en la época, implicaba expresamente que los docentes se desempeñaran de esa manera en sus clases, para que así estos no perdieran su autoridad en el aula, con lo que se creía que se podía lograr mayor disciplina y aprendizaje de los alumnos. En el fondo su actuar responde a los patrones educacionales de la época. Aqui vemos reflejada la importancia de los métodos pedagógicos utilizados en el aula, y de como estos influyen directamente en el aprendizaje de los estudiantes. Si encontramos un profesor autoritario, que solo transmite conocimiento y que no se preocupa de los estudiantes como seres individuales y diversos, obviamente esos estudiantes, no van a interesarse mayormente por aprender, y si el caso es extremo, donde el profesor provoca temor en ellos, es muy probable que cumplan con sus deberes solo por temor y rutina lo cual implica que muchos no adquieran las las herramientas necesarias para aplicar esos conocimientos fuera de la sala de clases, en sus rutinas de vida diaria.
Actualmente gracias a los diversos estudios acerca de como funciona la mente humana, y de como esta adquiere conocimiento, aunque nada es certero y exacto en este ámbito, es sabido que los métodos mencionados en el texto no son muy fructíferos si se quiere lograr real interés por parte de alumno hacia el aprendizaje, por lo cual debieran estar totalmente obsoletos, sobre todo si nos enfocamos a la corriente constructivista en donde los estudiantes son quienes construyen sus propios conocimientos guiados por el profesor, pero en la práctica aún podemos observar docentes que se rigen por esas técnicas, muchos utilizando la violencia como forma de hacerse respetar, quizás ya no se observan tantos casos extremos de violencia física, pero si existe la violencia verbal. Y para que mencionar los métodos que utilizan para pasar sus materias, ya que es muy recurrente que un profesor dicte cosas textuales, negándole de cierta forma a sus estudiantes, el cuestionarse acerca del tema ni mucho menos les permite alcanzar el conocimiento de manera conjunta.
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